LA LEYENDA DEL JACARANDÁ
Antes de ir a Tehuacán y encontrarme con ese despliegue increíble de jacarandás florecidos, caminando rumbo a un fraccionamiento que lleva su nombre, iba recordando la leyenda que había leído días antes.
La mayor parte de estos relatos tienen al amor, la belleza, la juventud, la osadía como protagonistas y aunque muchas de ellas tienen un final dramático, en realidad fue el nacimiento de una unión eterna que deja una señal viva de que el verdadero amor nunca muere.
Los jacarandás me rodeaban por todos lados por los que pasaba, recordaba a aquellos que había plantado con mi padre al frente de la casa antes de emigrar.
*

*
Hermosos momentos, hermoso recuerdo, hermoso como ellos, frescos, tiernos, etéreos…
«Cuentan que por el siglo XVII llegó una tarde de verano a la misión jesuítica que estaba en el norte argentino, un español de mediana estatura, ni muy viejo ni muy joven, de renegridos cabellos y carácter autoritario y altanero.
Traía consigo a su hija, una jovencita de escasos dieciséis años, cuyo nombre era Pilar.
Era muy bonita, no solo por su bella figura, sino porque su renegrido cabello, tal con el de su padre, contrastaba con sus ojos profundamente azules morados, heredados de su difunta madre, eso llamaba mucho la atención.
*

*
La joven pronto encontró en que ocupar su tiempo, enseñaba a leer, a escribir a los aborígenes porque solo hablaban guaraní.
No pasó mucho tiempo que todos adoraban a la dulce y paciente Pilar.
Los nativos, entre otros menesteres, se ocupaban de la agricultura y entre ellos sobresalió un joven cuyo nombre era M`bareté.
El muchacho, de no más de veinte años, era esbelto y fornido, su piel canela, y ojos y cabello negro mostraban siempre una sonrisa a flor de piel que dejaban ver unos imponentes dientes blancos.
*

*
Cierta tarde de primavera, Pilar se cruzó con M`bareté y él sin pensarlo dos veces le habló en perfecto castellano, ella no pensaba que un nativo entendiese su lengua y menos que la halagara diciéndole que era hermosa. Pilar quedó cautiva de M`bareté, se veían a escondidas y no consideraban que las diferencias fueran insalvables.
Él le propuso irse a vivir juntos, ella aceptó, lo mantuvieron en secreto, para ello construyó en silencio una cabaña del otro lado del río.
Ambos jóvenes estaban felices, pero en su interior sabían que el padre de Pilar no consentiría, razón por la cual nada decían de sus encuentros amorosos y menos de la decisión que habían tomado.
*

*
Llegado el otoño los jóvenes amantes tenían todo listo, y una tarde sin decir nada huyeron juntos.
Pronto el padre se enteró de sus amores y comenzó la búsqueda.
Encontrarlos le llevó mucho tiempo y en el trascurso de la búsqueda el padre cada vez se encolerizaba más porque no admitía que su hija, según él una dama, se relacionara con un nativo al que calificaba de indio bruto.
Pasó el otoño y el invierno y no había noticias de la joven pareja que vivía una bella historia de amor, mientras tanto el español estaba cada vez más indignado.
*

*
Llegando a noviembre, una expedición de cazadores a su regreso, informó haber visto a la pareja del otro lado, río abajo.
Su padre encabezó la búsqueda, no fue fácil acceder al lugar, al llegar, al verlos juntos sin mediar palabras les apuntó y les quitó la vida a ambos.
Al enterarse de lo sucedido, los sacerdotes de la misión enviaron a buscar los cuerpos para darles cristiana sepultura, pero como por arte de magia, los cuerpos habían desaparecido y en su lugar encontraron un nuevo árbol fuerte y vigoroso como el mismo M`bareté y de cuyas ramas crecían flores tan azules violáceas como los ojos de Pilar y del cual afloraba un aroma fresco, suave y sensual que inundaba el ambiente y que todos llamaron jacarandá.»
MÉXICO
MARZO 23
*
CIUDAD DE MÉXICO: LAS JACARANDAS EN FLOR
EN BUSCA DE LAS FLORES AMARILLAS
EN BUSCA DE LAS FLORES AMARILLAS (2)
*
Te invito a visitar mi página de face
Y TAMBIÉN EL BLOG
puedes encontrar otras entradas que te interesen.
GRACIAS A TODOS!!!! SALUDOS!!!!


Las leyendas contienen una historia y un mensaje oculto, de esta queda un consejo: que la pasión no te impida descubrir la profunda belleza tras los actos ajenos. Un abrazo.
Es una árbol muy hermoso.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Buen mensaje Carlos, gracias por él. Si es un árbol muy pero muy hermoso, da gusto estar bajo él y sentir sus florecillas caer. Abrazo grande
Me gustaLe gusta a 1 persona
No sabía de esto, si lo hubiese sabido mi mamá hubiese estado aún más fascinada. Gracias por compartir esto Themis, muy lindo. Un gran abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sí, le hubiera encantado a tu madre, es muy linda la leyenda esa unión de la fuerza de él con los ojos violáceos de ella, es de mucha belleza. Gracias Maty, abrazo bien grande
Me gustaMe gusta
Me encantó la leyenda, no la conocía.
Aunque es verdad, que todas las leyendas se parecen. Y muy buenas las fotos, el jacarandá es un árbol que a nadie deja indiferente.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias Ruth, las fotos son rumbo al lugar donde tengo doy el taller, está lleno de jacarandás, es hermoso hacer el recorrido e irlos viendo. Un abrazo grande
Me gustaMe gusta
¡Qué bonita historia nos traes de nuevo y qué bien contada! Casi puedo percibir la fragancia que se desprende de tu narración. Un abrazo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias José Manuel, lindas tus palabras, te mando un abrazo bien grandote
Me gustaLe gusta a 1 persona
Qué bonita historia, Themis, creo recordarla, en uno de mis viajes a México. Gracias, pues hay historias tan hermosas en nuestros dos mundos, que merece la pena saber. Lo he disfrutado. Te mando mi cariño de siempre y mi admiración por tanto que sabes y compartes de la tierra donde habitas. Eso es admirable. Mi abrazo fuerte.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Gracias Julie, muchas son las leyendas que abundan por estas tierras, a veces hasta van cambiando de un lugar a otro, son hermosas. Me alegra que te recuerden a este México que has conocido tan de cerca y regresártelo a tu corazón. Abrazo grande
Me gustaLe gusta a 1 persona